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Nadie puede igualar a Max Verstappen. El tricampeón del mundo volvió a subirse al primer lugar del podio, esta vez en Jeddah, y sigue sin parar hacia lo que podría ser su cuarta corona. Es cierto que fue otra carrera fácil para el neerlandés, que se escapó del grupo de corredores desde el principio y no dio ninguna oportunidad a sus rivales. Su trabajo fue controlar a Checo Pérez a distancia. El único "pero" fue que Charles Leclerc le robó el punto extra de la vuelta rápida, pero poco parece importar viendo la ventaja con la que ya dispone tras solo dos Grandes Premios. Será realmente difícil detener este año a alguien de Hasselt. ¿Podrán lograrlo alguien?
"Creo que ha sido un fin de semana fantástico para todo el equipo, ya no solo para mí. Ha sido lo mismo en la carrera, la última tanda ha sido más larga de lo que queríamos, pero con el Safety Car había que entrar, y las últimas vueltas, con los doblados y neumáticos fríos, era algo deslizante, pero teníamos hueco y hemos podido gestionar la diferencia, así que muy contento. No se debería hacer una tanda tan larga, especialmente con tantas curvas de alta velocidad, ya que si los neumáticos salen de la ventana, te complican la vida. También se vuelve en contra de las agujas del reloj y, sin duda, es uno de los circuitos más físicos del calendario".