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La Fórmula 1 llega a Montmeló, España, y como cada año, Fernando Alonso enfrenta esta prueba de una manera especial. Correr en casa siempre significa una inyección adicional de moral. El doble campeón del mundo se muestra emocionado y con mucha ganas de subirse al monoplaza para dar lo mejor de sí y regalarle al público una gran actuación. Además, confía en que la optimización de las actualizaciones sigue mejorando y, por lo tanto, les permitirá ser más competitivos. Veremos qué pasa, pero Aston se enfrentará a una gran prueba de fuego en un circuito que representa perfectamente el rendimiento real de cada coche.
Otra buena memoria mía es la ola azul de 2005 y 2006, que ahora se convierte en una ola verde. La degradación de los neumáticos es un factor clave en esta pista, lo que significa que la estrategia de parada en boxes es importante en la carrera. Adelantar no es fácil, por lo que será importante asegurarse de que el coche esté configurado correctamente antes del sábado, ya que la posición de clasificación es crucial para tener un buen domingo. Es un circuito conocido por todos los pilotos y equipos, dado que todos tienen mucha experiencia allí.
Eliminar la curva mejoró el último sector, haciéndolo más fluido y haciendo que la gestión de los neumáticos sea aún más importante durante la carrera. Creo que es divertido volver a cruzarlo a alta velocidad. El equipo trabaja con todo su esfuerzo para traer piezas nuevas a cada carrera y esperamos poder mejorar nuestra competitividad. El Gran Premio de España inicia una serie de tres carreras consecutivas, por lo que necesitamos trabajar juntos como equipo para asegurar que sacamos el máximo de cada fin de semana.